28.3.05

El cine va bien

Después de algunos días de inmerecidas vacaciones, este lugar vuelve a su actividad normal, donde el delirio y lo rutinario se dan la mano. En estos días de estúpida festividad (la verdad es que el motivo de la mayoría de las fiestas me parece deleznable y vomitivo, ¿por eso nos esforzamos en beber y beber para llegar a sentir ese asco profundo al llegar la madrugada…? Je, jejeje…) se me ha pasado mencionar algunas cosillas, así que a ver si me pongo al día…

Me gustaría comentar, aunque sólo sea de pasada, que el pasado día 23 de marzo se estrenó Team America: la policía del mundo, la nueva película de Trey Parker y Matt Stone, los creadores de South Park. Es una cinta de animación protagonizada por marionetas, y con el típico tono corrosivo e irreverente que caracteriza a sus ideadotes. Team America es un grupo americano encargado de defender al planeta de la amenaza terrorista. Con este claro principio, este grupo especial se carga la torre Eiffel y demás en París, alguna pirámide en El Cairo, etcétera… Mamoneos garantizados en esta producción estadounidense plagada de críticas y parodias (Kill Bill inclusive), de la que pocos americanos podrán sentirse orgullosos. Un descojone, vamos.

Han caído en la cartelera de Barcelona, además, algunos otros films interesantes, y me parece una época especialmente fértil al respecto, pero para quien prefiera un poco de revisionismo, ahí están esos cines de reposiciones que representan un auténtico paraíso de maravillas rescatadas en nuestra ciudad. Ojito a la programación de los MÉLIÈS CINEMES: Pi, fe en el caos (Darren Aronofsky), Mystic River (Clint Eastwood), Coffee and cigarettes (Jim Jarmusch), Diarios de motocicleta (Walter Salles), Réquiem por un sueño (Darren Aronofsky), y ¡Olvídate de mí! (Michel Gondry). Creo que todas (excepto Diarios de motocicleta, que aún no he visto) son acojonantes, por lo menos, y en el caso de Réquiem por un sueño me quedo corto, no porque sea la mejor, sino porque acojona de verdad por lo descarnado e impactante de su historia. Si se os ha escapado alguna en su momento, id a verla, porque durante más o menos una semana tenéis la oportunidad de disfrutarlas en pantalla grande. Creo que entre ellas tienen poco más en común aparte de lo buenas que son.

Y por si todo esto fuera poco en cuanto al menú cinematográfico disponible en estos días en BCN city, en la Filmoteca de Catalunya empieza un ciclo dedicado al gran actor catalán Sergi López, un auténtico monstruo.

Así que si alguien (que no creo) se queda en casa quejándose de las películas religiosas que dan por la televisión, es su problema. Yo, no lo puedo evitar, soy un amante de la pantalla grande (y de la versión original, pero esa es una polémica en la que no me gustaría entrar). Será porque me encantan los espacios oscuros, no sé, o porque soy un optimista y pienso que el cine moderno va bien, muy bien, encaminado.