SARABAND, un film sincero e imperfecto
Saraband. Suecia. 2003. Director: Ingmar Bergman. 107 minutos. Con: Liv Ullmann, Erland Josephson, Börje Ahlstedt, Julia Dufvenius, Gunnel Fred.
La perfección no existe, y tampoco la verdad, pero a veces una película imperfecta como Saraband nos hace formarnos la ilusión de que nos acercamos a tocar esos ideales de PERFECCIÓN y VERDAD, y nos permite acercarnos a la esencia de la frágil e injusta naturaleza del ser humano. Saraband es una película fea y austera, de descuidada fotografía (la definición de la imagen digital es pésima), y montaje más que deficiente que parece obra de un novato; pero, sin embarggo, los actores son excelentes, y cuando la película avanza y la intensidad comienza (pronto) a alcanzarnos, nos damos cuenta de lo bien dirigida que está. O lo justificamos prácticamente todo. Y es que tras la cámara se esconde un maestro de maestros, un verdadero genio de los sentimientos, el incombustible Ingmar Bergman, que poco a poco demuestra su poder, desnudando sin vacilación la verdad de los personajes principales, sin adornos ni excesos de ningún tipo, narrando desde la austeridad más absoluta (casi parece un film Dogma, o un telefilm, o una obra de teatro...), hasta dar con una reflexión sobrecogedora sobre el hombre, la vida y la muerte.
Y tras ver una película como Saraband, que parece tan deficiente en muchos aspectos, que es horrible y arisca como la vida misma, y que duele tanto, sientes entonces lo difícil que se hace en ocasiones seguir adelante. Porque te entran ganas de borrar todo lo que has dicho hasta ahora, porque todo lo que has dicho te parece tan vacuo...
Saraband te hace mejor persona, más pequeño y humilde, pero duele continuar, duele saber lo poco que queda, lo poco que sabes, lo poco que importa... Duele mucho darse cuenta del hondo dolor que hay al final de todo, y duele tratar de seguir viviendo y soñando, y tratar de seguir convenciéndote a ti mismo de que el mundo es maravilloso.
Valoración personal [1-10]: 9.
Ir al Catálogo fantástico de películas del Bastión de los Sueños.
La perfección no existe, y tampoco la verdad, pero a veces una película imperfecta como Saraband nos hace formarnos la ilusión de que nos acercamos a tocar esos ideales de PERFECCIÓN y VERDAD, y nos permite acercarnos a la esencia de la frágil e injusta naturaleza del ser humano. Saraband es una película fea y austera, de descuidada fotografía (la definición de la imagen digital es pésima), y montaje más que deficiente que parece obra de un novato; pero, sin embarggo, los actores son excelentes, y cuando la película avanza y la intensidad comienza (pronto) a alcanzarnos, nos damos cuenta de lo bien dirigida que está. O lo justificamos prácticamente todo. Y es que tras la cámara se esconde un maestro de maestros, un verdadero genio de los sentimientos, el incombustible Ingmar Bergman, que poco a poco demuestra su poder, desnudando sin vacilación la verdad de los personajes principales, sin adornos ni excesos de ningún tipo, narrando desde la austeridad más absoluta (casi parece un film Dogma, o un telefilm, o una obra de teatro...), hasta dar con una reflexión sobrecogedora sobre el hombre, la vida y la muerte.
Y tras ver una película como Saraband, que parece tan deficiente en muchos aspectos, que es horrible y arisca como la vida misma, y que duele tanto, sientes entonces lo difícil que se hace en ocasiones seguir adelante. Porque te entran ganas de borrar todo lo que has dicho hasta ahora, porque todo lo que has dicho te parece tan vacuo...
Saraband te hace mejor persona, más pequeño y humilde, pero duele continuar, duele saber lo poco que queda, lo poco que sabes, lo poco que importa... Duele mucho darse cuenta del hondo dolor que hay al final de todo, y duele tratar de seguir viviendo y soñando, y tratar de seguir convenciéndote a ti mismo de que el mundo es maravilloso.
Valoración personal [1-10]: 9.
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J.Álvarez.
12:33
Comentarios: 9
LA VERDAD: existen 3 verdades, la de uno, la de otro y la verdad.
Y weno ké decirte trankilo Sr. J.Alvarez (es ke me ha impactado tanto respeto, ahora no sé komo debo trataarle) la vida ensucia, duele y mata. Uno nace y después todo se komplika.
Pero la vida sigue siendo maravillosa, kreo ke para eso no hay nada mejor ke hacer lo ke hace un amigo mío simplificar las kosas. Dé ké están hechas las pirámides?-a fin de kuentas de areniska. Y miralas ahí las tienes.
Saluditos.
Y ya se me ha ido la olla. Perdón.
Este artículo tuyo me ha gustado mucho, mira, me coge en un mom,ento bastante sensible a mí también, es que hoy es como si de golpe todo se cuadrara delante de mí para presentarse lo más bello, todo me parece hermoso, y la gente más bella de lo normal, y todo lo que encuentro a mi alrededor me parece fuera de lo corriente... y entonces he llegado por casualidad a esta web y coincido por completo con lo que pone sobre la película Saraband de Ingmar Bergman... y,bueno, mire, me impresiona, claro...un abrazo, y mis más sinceras congratulacionmes...
Se me olvidaba, gracias x arreglar lo de los oskar, tenias razón era la mejor parte.
Otra kosa, la rumorología (si es ke no hay más ke gentuza) komenta x ahí ke Jimi Hendríx fue kién inventó el feed back, pero no sé. Yo ni sikiera estaba en proyecto.
Eso de que Hendrix invento el feedback es absurdo completamente, el feedback es un hecho de naturaleza fisica por asi decirlo,el feedback o retroalimentacion es lo que vulgarmente se llama "acople", como cuando un micro (con una amplificacion lo necesariamente alta)esta muy cerca del altavoz al que esta enchufado ese mismo micro,se crea un ...digamos Bucle cerrado:Lo que amplifica el micro y sale por el ampli bafle o lo que sea por la proximidad de ambos,hace que el micro capte su propia señal amplificada la vuelva a amplificar y etc etc(ese es el pez que se muerde la cola) Y de la misma forma esto es perfectamente aplicable a una guitarra electrica...¿¿¿¿Como se puede "inventar" eso???...Otra cosa es decir que fue el primero en utilizar feedback como medio o lenguaje,lo cual tampoco es cierto, almenos que yo sepa Pete townsend,ya llevaba un par de años utilizandolo como medio expresivo en conciertos de THE WHO, aunque parece ser que Hendrix no lo imito del señor destroza guitarras townsend,simplemente surgio de forma expontanea en el,como al guitarrista de the who al otro lado del charco...(toma ya) :)
Traslademos la discusión al post anterior...
Hendrix era un músico soberbio en cualquier caso, y sobre lo que he leído de Saraband estoy muy de acuerdo, pero claro, caballero, es que si no tengo mal entendido Bergman hizo este trabajo originalmente para tv, y no para ser exhibido en grandes salas, de ahí su mala calidad, aunque es cierto que algunos cortes y cambios de plano son un tanto bruscos y apresurados. Recientemente vi también otra de sus grandes obras: Fresas Salvajes, y esa sí que es el no-va-más. La vió usted, señor Álvarez?
Weno, vale Sr. Alvaro, acepto barko komo animal akuátiko.
En lo de Hendrix no m meto... yo he dicho suficiente, creo, en el post...
...En cuanto a Saraband e Ingmar Bergman (el director, je,je... a no confundir con la preciosa actriz, Ingrid Bergman, que fuera esposa de Rosselini), la peli es como he dicho, una peli muy cruda y desnuda, una historia (que, sin ser una tragedia, conmueve y duele enormemente por su profundidad grandísima) repleta de sentimientos a flor de piel. Es básicamente la historia de un anciano que ya se ha apartado definitivamente de la vida, y de todo lo que fue, y quiere pasar sus últimos años en soledad, con la única compañía de la muerte y,acaso, del dolor.
A sus 87 años Bergman habla con sinceridad de la vejez y la muerte... y esa sinceridad desarma realmente...
Lo siento si he molestado a alguien,pero cuando se habla de musica me acelero...siento que las palabras escritas no tengan entonacion porque ha podido resultar otra cosa a quien lo leyese,y no me enrollo mas que esto va de Bergman
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