La odisea sonora de Neu! (2)

En una primera parte de esta odisea sonora, escrita con motivo de la feliz reedición de los discos de Neu!, ya avanzaba el comienzo de la historia de uno de los más interesantes grupos de la Alemania de los setenta, de aquellos pertenecientes al movimiento llamado “Krautrock” (sin apenas otro punto común entre ellos que la originalidad). Esta segunda parte, escrita igualmente por el gran conocedor de esa época, mi gran amigo y compañero de penurias musicales, Álvaro Vega, pretende centrarse en la discografía esencial de Neu!, esta inigualable formación compuesta por Klaus Dinger y Michael Rother, que deben descubrir todos aquellos que estén interesados en los discos y canciones que van un paso más allá de lo convencional y/o en la verdadera evolución de la música popular hasta nuestro tiempo.














La odisea sonora de Neu! (2). LOS DISCOS:



-Neu! (1972)

[+...]

La primera pieza del disco es Hallogallo; en el fondo, y de alguna forma la esencia de lo que es Neu! ya esta ahí, y seguramente mucho de lo que Kraftwerk deseó plasmar entra también en esa misma ventana... Hallogallo es una canción sensacional, intrépida y que, aún ahora, suena a nuevo, con esa batería con un ritmo 4/4 prácticamente inalterado, y el bajo repetitivo, cíclico, que se desliza por los aproximadamente diez minutos que dura la canción. Toda la base rítmica en primer plano insiste sin descanso sobre un fondo electrónico de osciladores “hechos a mano”, guitarras distorsionadas con efectos Fuzz y Wha-wha, pasadas a veces incluso hacia atrás, creando la belleza de lo antes no imaginado, la sorpresa del agujero en la pared por el que puedes mirar y descubrir la frescura de lo impasible.
Destacaría otro par de canciones de este disco imprescindible, para no extenderme demasiado. La primera es la que abre la cara B (de los antiguos vinilos, claro) Im Glück (soy feliz) donde se adentraban en un ambient muy personal, incluso antes que Cluster (otra banda alemana, coetánea y también pionera de estos nuevos sonidos) y por supuesto antes que Brian Eno, que por aquel entonces aún militaba en las filas de Roxy Music.
Y por último destacaría también la canción que irrumpe destrozando la calma, Negativland, que entra ametrallando con un coro de máquinas percutoras de asfalto y el clamor de un gentío que abre la pieza. De otro mundo.
Esta canción (Negativland) es claramente precursora de la llamada a finales de los setenta música industrial o Electronic Body Music, de grupos como Front 242, Throbbing Gristle, SPK, Coil o DAF.
El disco Neu! tuvo bastante repercusión a cierto nivel, vendiéndose sólo en la RFA la cantidad de 35.000 copias; e incluso en España, donde Hallogallo fue una especie de hit en las discotecas progres de la época, llegando a disco de oro.

-Neu! 2 (1973)

[+...]

Encontrado ya el filón de una identidad propia, se lanzan en 1973 y sacan NEU! 2, sólo que durante la grabación del disco hubo un problema que creo que pone de relieve la posición en la penumbra que tenían todos estos grupos...
En la cara A del vinilo la música continúa con el mismo concepto y logros del primer disco, más desarrollados acaso, más ramificados sobre si mismos... Für immer (para siempre), la canción que abre el disco, es una digna sucesora de Hallogallo, tal vez más concreta y pulida. Después de este corte nos encontramos con un proceso de construcción-deconstrucción de esos planteamientos, cerrando con otra canción preindustrial, rabiosa y mágica como es Lilac angel (ángel de lilas).
El “problema” al que me refería empieza, sin embargo, en la cara B. Al no tener más presupuesto para poder alquilar el estudio de grabación, y restando aún toda una cara por finalizar, Klaus tiene la extraña y digamos “polémica” idea de recuperar el single Neuschnee/Super, y grabar ambas canciones (ya publicadas, aunque sólo en formato de sencillo) pasándolas a diferentes velocidades, además de incluir las versiones originales, y, de una forma absolutamente nihilista, destrozarlas sin piedad, incluso pasándolas por un magnetófono estropeado de Michael Rother… Se añaden ecos, a veces se escucha a los propios autores hablando de fondo... o se añaden loops relantizados, repeticiones de fragmentos de la cara A, etc..., creando así, en definitiva, a través de la falta de medios, un contexto asombrosamente nuevo, audaz, y a veces delirante, y siempre jugando con la sorpresa.
El disco se compone pues de dos partes: una primera sensacional y más original, y una segunda que supone un caos repleto de autorreferencias y vueltas de tuerca a un concepto tremendamente radical y arriesgado, cercano al deconstructivismo, y de carácter claramente nihilista. Como dato anecdótico, en mi vinilo de segunda mano de la edición original española de Neu! 2 hay una advertencia muy curiosa. Dice así :

“Alguno de los efectos sonoros que se oyen en este segundo álbum de Neu, podrían inducir a error al oyente, haciéndole creer que se trata de defectos de prensaje del disco o de la velocidad de su tocadiscos. Sin embargo no es así .Tales efectos están incluidos deliberadamente en la grabación matriz”.

Pasaron dos años antes de que se pariera un nuevo disco. Mientras, por un lado, Michael Rother se unió a los miembros de Cluster para formar Harmonia, y por otro Klaus Dinger empezó a fraguar su proyecto que tardaría algo más en gestarse y se acabaría llamando La Düsseldorf.

-Neu! 75 (1975)

[+...]

En 1975, Neu! se reúnen de nuevo bajo los auspicios del “Martin Hannett alemán” Mr.Conrad Plank, esta vez en forma de cuarteto (añadiendo a la banda las baterías en la cara B de Hans Lampe y el Hermano de Klaus, Thomas Dinger).
Éste es, quizás, por sus contrastes, el mejor disco de Neu!, y es que mientras que la cara A del vinilo es bastante calmada, la segunda supone una verdadera ruptura de rabia y ruido. En la primera cara está Isi (otro prototipo de instrumental techno puramente Neu!, que en cierta forma sería como un Hallogallo de corta duración y con estructura más pop)... Después viene Seeland, una canción deliciosa y calmada, reflejo de lo que M. Rother va a hacer en solitario después: melodías repetitivas de guitarra evocando una melancolía muy especial. La cara A termina con una especie de "nana ambient": Leb´ Wohl.
Nos levantamos y giramos el disco a la cara B (je,je,je, soy un nostálgico, pero es que yo lo escuché primero en ese formato, y luego vendrían los cds…), y aquí la cosa cambia por completo: Hero se anticipa a la rabia punk, es una mezcla entre la The Velvet Underground y Johnny Rotten, pero es mucho más que eso… Además contiene, por supuesto, ese hipnotismo metronómico característico de Neu!, y lo raro es que además tiene un ritmo bailable. Hero es una canción indiscutiblemente genial y desconcertante, y que impacta a la primera escucha (demostrado). Después de ésta, nos encontramos con otra canción, E-Musik, donde el tratamiento de la batería (pasada por un efecto “flanger”) da que pensar sobre las similitudes con el Trans-Europe Express de Kraftwerk (recordemos que estamos en 1975 y mucho de lo que este disco anticipa aún no existe, ni por asomo, en el panorama musical internacional).
Y, para finalizar, After Eight, otra auténtica locura; guitarras saturadas y un cierto parecido con el White Light-White Heat de la Velvet, pero más abrasiva... Y es que el productor, el señor Conny Plank, era un mago...

En fin, aquí acaba esta aproximación a este grupo, un grupo de culto demasiado desconocido en relación a su descomunal talento y originalidad, un grupo expoliado hasta la saciedad… Y es que a veces el mundo (incluído el del arte) puede ser muy injusto; pero si Mr. Tom Yorke (líder de Radiohead) se enrolló y persuadió a su compañía de discos (EMI) para que reeditaran estos tres discos, tu también deberías hacerle caso y echar un vistazo en alguna tienda de discos, ¿no crees?

Para dar al lector una última pista acerca de la gran influencia de Neu!, me remitiré a la lista de discípulos, que lo son o que lo fueron en su momento, desde David Bowie en su época Berlinesa (Low, Heroes...) pasando por muchos grupos de los 80 como OMD, Ultravox, Psychedelic Furs… y, en fin, gran parte de la nueva ola y el post punk, hasta nuestros días, con la gran influencia ejercida sobre el techno y el gran mar de músicas electrónicas, o gentes dispares como Radiohead, Stereolab, e incluso de The Strokes o los más recientes The Secret Machines.

…No olvidéis a Neu!, un grupo en la sombra, de enorme influencia, que quizás en el siglo 22 ó 23 alcance el reconocimiento merecido…